Tal día como hoy: la muerte de un rey

Por: Ferran Garcés

En la foto de cabecera vemos el sepulcro del rey Martín I el Humano, en el panteón real del monasterio de Santa María de Poblet. La obra es de Frederic Marés y fue inaugurada en 1952. La Torre Bellesguard está inspirada en el antiguo palacio donde este monarca quería vivir plácidamente los últimos años de su vida. Desafortunadamente, el destino no se lo permitió.

Un día como hoy, en 1410, Martín I moriría en circunstancias  trágicas. Esta es la historia resumida de esos últimos momentos. Una historia, por cierto, con muchos hechos que tuvieron lugar en el mes de mayo (1). De hecho, el rey Martín I llegó al trono debido a la muerte repentina de su hermano, Juan I el Cazador, un 19 de mayo de 1396, y fue un 26 de mayo de 1409 cuando se trasladó al palacio de Bellesguard. También fue un 12 de mayo de 1410 cuando lo abandonó para no volver nunca más…

Antes del 26 de mayo de 1409

Marin I entró solemnemente a Barcelona el 27 de mayo de 1397. Ahora bien, no fue hasta finales de 1408, cuando el nuevo monarca compró una antigua casa señorial llamada Vallblanch y comenzó a transformarla en un palacio real al que le daría el nombre de Bellesguard. Han llegado hasta nosotros las cartas donde el monarca solicita a diferentes funcionarios toda una serie de productos y personal para embellecer y acomodar el nuevo palacio a su gusto. Por ejemplo, parras de uva, árboles frutales, vidrieras y un sacerdote de Santes Creus (2).

Sin embargo, a principios de 1409, Martín I tenía preocupaciones más serias. En la isla de Cerdeña había estallado una rebelión. Martín el Joven, su primogénito y el único hijo que había llegado a la edad adulta, era el responsable de sofocarla. Para ayudarlo, la ciudad de Barcelona, a petición de Martín I, estaba formando una flota de guerra…

25 de mayo de 1409

Desde la playa de Barcelona, ese día, el monarca vio salir esa flota en dirección a Cagliari, la capital de Cerdeña, donde lo esperaba su primogénito. Al día siguiente, se trasladaba por primera vez al palacio de Bellesguard, a pesar de que las reformas aún no habían terminado (3).

Después del 26 de mayo de 1409

Mientras el monarca comenzaba a instalarse en su nuevo palacio, llegaron dos noticias muy diferentes. En la primera, se le comunicaba la victoria de Martín el Joven en Sanluri, Cerdeña. En la segunda, recibida pocas semanas después, el mensaje era que el primogénito había muerto repentinamente de unas fiebres.

Como la madre del difunto, María de Luna, había fallecido a finales de 1406, ahora era necesario encontrar una nueva reina para facilitar otro heredero a la corona. La boda entre Martín I y Margarita de Prades, la joven elegida, se celebró en la nueva capilla del palacio de Bellesguard, pero, debido al luto por la muerte reciente de Martín el Joven, fue un enlace reservado y sobrio.

De manera paralela a esta mezcla de noticias buenas y malas, un joven Fernando de Castilla, hijo de Juan I de Castilla y de Leonor de Aragón, hermana de Martín I, conquistaba la ciudad malagueña de Antequera, ganando el sobrenombre por el que es conocido. Su destino no tardaría en cruzarse con el trágico desenlace de la historia de Bellesguard…

12 de mayo de 1410

El rey Martín I abandonó su querida residencia de Bellesguard para atender asuntos de Estado o para huir de las obras del palacio, que aún no habían terminado. Nunca regresará…

31 de mayo de 1410

La muerte sorprenderá al rey un día como hoy en el antiguo Monasterio de Valldonzella, que, entonces, se encontraba cerca de la actual Creu Coberta, en las afueras de Barcelona.

Con la muerte de Martín I el Humano se extingue el Casal de Barcelona, planteando una grave crisis dinástica. No se resolverá hasta dos años más tarde, con el llamado Compromiso de Caspe, del cual saldrá favorecida una nueva dinastía, la de los Trastámara, representada por  Fernando I de Antequera, que fue proclamado rey de Aragón el 28 de junio de 1412.

El nuevo monarca nunca hará uso del palacio de Bellesguard. En poco tiempo, se convertirá en ruinas y leyendas. Ahora bien, ruinas que, cinco siglos después, restaurará Gaudí, y leyendas que él, y su discípulo Domènec Sugranyes, evocarán en la actual Torre Bellesguard. Ven a conocer cómo lo hicieron…

Notas

(1) El principal libro de referencia seguido para establecerr esta cronología es uno de los pocos estudios específicos que existen, de momento, sobre Bellesguard: Vall i Comaposada, Josep M. (2014), Bellesguard. De la residencia de Martí el Humano a la Torre de Gaudí, Duxelm editorial, Barcelona, p. 43-73.

Si el lector prefiere una novela, le recomendamos Los herederos de la tierra, de Ildefonso Falcones. En concreto, el capítulo 17, donde se menciona los últimos días del rey Martín I.

(2) Vall i Comaposada, Josep M. (2014), Op. Cit., p. 139-149.

(3) Tasis i Marca, Rafael (1980), Pedro el Ceremonioso y sus hijos, Historia de Cataluña. Biografías catalanas. Vol VII, Vicens Vives, Barcelona, p. 230.