¿Sabías qué? Bellesguard DESPUÉS de Gaudí, orfanato y clínica

Por: Ferran Garcés

En las entradas anteriores del mes de agosto, hemos visto algunos capítulos de la larga historia de Bellesguard antes de Gaudí, cuando fue, entre otras cosas, la residencia de un rey y un papa, la posible guarida de un bandido y una academia atrapada en una gran guerra. La historia después de Gaudí también es sorprendente…

 

Los primeros propietarios de la torre fueron los Figueras, un ejemplo representativo de las familias burguesas de la época del modernismo (1), pero no residirán mucho tiempo allí. Diferentes problemas económicos los obligarán a abandonar la finca. Se ha conservado el anuncio de venta, publicado en el diario La Vanguardia, el 18 de agosto de 1925, y otros dos de medios de 1927. En ellos se enfatizaba claramente que era una obra de Gaudí y, además, se informaba que el terreno disponía de árboles frutales, molinos eléctricos y gallinero (2). A pesar de esto, la casa no volvería a acoger a una familia hasta 1944. La familia Guilera, una familia de médicos, transformó la torre en una clínica oncológica primero y luego en una maternidad. Antes del hospital, sin embargo, Bellesguard fue un albergue de huérfanos.

 

Orfanato

Por falta de información, el período de la guerra civil es uno de los momentos que aún presenta más dificultades para los investigadores. Parece seguro que Bellesguard fue un orfanato, aunque todavía no se conocen los detalles (3). La opinión más generalizada es que fue un hospicio solo para niñas dirigido por las Oblatas, una congregación religiosa que, a principios del siglo XX, se alojaba en un edificio situado al lado de la torre de Gaudí y hoy es la sede de la facultad Abat Oliba (4). Desafortunadamente, no tenemos fotos de Bellesguard en ese entonces. En cuanto al registro de la propiedad, la finca quedó en manos de un poseedor que nunca se alojó en la torre (5). No será hasta 1944 que la casa albergará de nuevo a una familia, y será una familia de médicos…

 

Clínica

Los segundos inquilinos del edificio diseñado por Gaudí serán la familia de Lluís Guilera Molas, un médico de gran prestigio, pionero en oncología y tratamiento de agujas de radiación en Cataluña. De joven, había estudiado en Alemania, especializándose en anatomía patológica y relacionándose con personajes renombrados como el matrimonio Curie y Ramón y Cajal.

Durante la época del franquismo, este médico fue acusado de rojo, no por rojo sino por catalanista, por lo que le quitaron la cátedra y los cargos. Imposibilitado para ejercer la medicina en hospitales públicos, decidió abrir su clínica privada, motivo por el cual compró Bellesguard. Allí no solo instaló su consulta y habitaciones de clínica, sino también su residencia, y vivió allí con su familia.

Aún se conservan los utensilios de trabajo y su investigación, fotografías, probetas y preparaciones para microscopio. Todo este material se indexará y ordenará para conservarlo y recuperar la memoria de uno de los médicos más prestigiosos de Cataluña. Esperamos poder mostrarlo pronto.

Su hijo mayor, Lluís Guilera Soler, especializado en ginecología y obstetricia, también ejerció medicina en Bellesguard. En la clínica convivieron diversas disciplinas y tipos de pacientes, oncológicos, ginecológicos y obstétricos.

La sala noble del primer piso entonces era el quirófano debido a que es la dependencia con más luz natural (en una época en la que los cortes de luz eran constantes). También en el primer piso se encontraban las 8 habitaciones y el control de enfermería. La familia del médico vivía en la planta superior, en el segundo piso. Durante la etapa de Lluís Guilera Soler, el ginecólogo, en la Torre Bellesguard nacieron un buen número de barceloneses y barcelonesas. Gracias a las visitas de algunos de ellos y ellas, hemos podido descubrir una parte de su historia. Siguiendo este enlace, los conoceréis: Los niños de Bellesguard.

Quirófano en la sala noble del primer piso.

Quirófano en la sala noble del primer piso.

Habitaciones de la clínica de Bellesguard.

Habitaciones de la clínica de Bellesguard.

Durante la década de 1970, la familia trasladó la maternidad a la Clínica Delfos, convirtiéndose en su departamento de ginecología y obstetricia. En ese momento, Bellesguard vuelve a ser aquello para lo que Gaudí la diseñó, un hogar lleno de vida.

En septiembre de 2013, después de importantes obras de restauración, la familia Guilera decidió abrir las puertas de Bellesguard al público. Hicieron posible que esta importantísima obra de nuestro patrimonio arquitectónico pudiera ser visitada. Con la calidad y el rigor como bandera, constituyeron un equipo de investigadores, el Equipo de Investigación Bellesguard, que lleva casi quince años descifrando los secretos que esconde esta porción de tierra y el edificio de Gaudí (6).

El fruto de esta investigación se publicará y se dará a conocer muy pronto, revolucionando todo lo que se creía conocer de nuestro más insigne y reconocido arquitecto internacionalmente, ya que Bellesguard es una obra muy personal de Gaudí, y nos deja mucha simbología y muchas técnicas que aún no se conocen.

Los descendientes de estos dos médicos residieron en la torre hasta las Navidades de 2018, cuando hubo un cambio de propiedad. El propietario actual es Catalana Occidente, un conocido grupo de seguros que, recientemente, se ha unido a otras compañías y ha cambiado el nombre a Occidente (7). En esta nueva etapa, Bellesguard se ha consolidado como equipamiento cultural de la ciudad de Barcelona y una pieza imprescindible para comprender la obra y la persona de Antoni Gaudí.

 

Notas

(1) Figueras i Bas, Josep Mª, (2016) La família Figueras. Els senyors de Bellesguard, Fotoletra, Barcelona.Información complementaria, en otras partes de nuestro blog. Consulta: Jaume Figueras y Maria Sagués.

(2) Una obra de Gaudí en venta en 1925”, blog Fundación Antonio Gaudi, consultado el 11/08/2023 (enlace)

(3) Más información en dos entradas de nuestro blog:

“Bellesguard fue un orfanato”

“Los niños de Bellesguard”

(4) El nombre completo de la congregación es el de Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor, y el de su edificio, el Asilo de Bellesguard, que no debe confundirse con la Torre Bellesguard, diseñada por Antoni Gaudí.

Vall i Comaposada, Josep M., (2014) Bellesguard. De la residencia de Martí el Humano a la Torre de Gaudí, Duxelm editorial, Barcelona, p. 92-100

(5) Gueilburt, Lluís (2003), Gaudí y el registro de la propiedad, Institut Gaudí de la construcción, Barcelona, p. 175-176. El nombre de estos dos propietarios que no residieron en la casa es: Francisco Soler Smith y Abdón Bordoy Pastor.

(6) El siguiente artículo se publicó en el momento de la apertura al público de Bellesguard y en él se dan a conocer algunos de los primeros resultados del Equipo de Investigación, así como sus integrantes: Milan, Alex, y Aguilera, Gemma, 10/09/2013 “De Martí I l’Humà a Gaudí”, El Temps, 12-29. (Enlace)

(7) “Las compañías de Grup Catalana Occident seremos Occident”, sitio web de Occident: (Enlace)